OPCIONES

viernes, 10 de agosto de 2018

BRAGANZA

BRAGANZA


Nuestra primera parada por nuestra ruta por el norte de Portugal ha sido la localidad de Braganza, situada al noreste del país vecino. Históricamente la localidad de Braganza se remonta a la época romana, cuando se llamo Juliobriga, aunque su importancia histórica toma relevancia cuando se ultima la reconquista en la zona, pues se reconstruye como ciudad, se le conceden fueros y se convierte en capital de la zona. Actualmente tiene una población de unos 35.000 habitantes y merece una breve parada en vuestro recorrido, en especial por la visita a la zona del castillo medieval.











Nos dirigimos hacia la zona de la antigua ciudadela amurallada, donde encontramos tres de los monumentos más relevantes de Braganza, su castillo medieval , la iglesia de Santa María y el Domus Municipalis. 


La ciudadela amurallada fue erigida por Alfonso Henriques, primer rey de Portugal en el año 1130; mientras que su hijo, Sancho I, mejoró sus fortificaciones y ordenó construir el Castillo de Braganza tras arrebatar la ciudad al rey de León en el año 1187.















El castillo de Braganza no tiene perdida pues está en el centro de la ciudadela, actualmente es un museo del ejército y la visita cuesta cuatro euros. En el castillo además de las murallas que lo protegen, destacan dos torres, la torre del homenaje, donde resaltan las ventanas góticas y la torre de la princesa. 



La exposición militar está dentro de la Torre del Homenaje, y describen la historia militar portuguesa desde la época colombina hasta la guerra de Angola.

Tras la visita a la exposición, nos damos un paseo por las murallas, y disfrutamos con las vistas de la propia ciudadela y de la zona amurallada, desde la torre del Homenaje a la Torre de la princesa, que no tiene acceso.


 Tras pasear por el patio de armas un rato más, salimos del castillo, la visita ha durado una hora aproximadamente. Salimos  un gran aparcamiento que tiene en su otro extremo la iglesia de Santa María. con su fachada blanca y su campanario. LA iglesia fue erigida en el siglo XVI, y dentro cabe destacar sus columnas mudéjares de ladrillo , la impresionante pintura al fresco de su techo, en la que se representa la Asunción de la Virgen, y la figura de María Magdalena que está ubicada sobre el altar. 












Los estilos arquitectónicos se mezclan en esta iglesia, ya que si bien la planta baja es de estilo románico, su pórtico es barroco, y tiene algunos elementos decorativos renacentistas.

Cuando entramos había misa, y es que nos sorprendió la cantidad de gente que nos hemos encontrados oyendo misa en Portugal.

Junto a la Iglesia de Santa María se encuentra el Domus Municipalis. Es un edificio de forma pentagonal del siglo XII, considerado como el primer Ayuntamiento de Portugal y uno de los pocos vestigios de arquitectura civil de la península ibérica.

El edificio tenia dos plantas, con ventanas de medio punto en todo el edificio. En la planta baja se acumulaba el grano, mientras que en la primera planta se usaba como lugar de reunión de los patricios o nobles de la localidad, por ello, se considera como el primer ayuntamiento de Portugal.




Callejeamos un poco por los alrededores, hay bastantes restaurantes por la zona y alguna cafetería. Se nos hace tarde y nos ponemos en marcha pues aun estábamos a casi dos horas de nuestro destino, una preciosa casa en Celorico de Basto.




No hay comentarios:

Publicar un comentario