ISLANDIA
PARQUE NACIONAL SKAFTAFELL, GLACIAR SKAFTAFELLSJÖKULL, GLACIAR SVINAFELSJOKULL, LAGUNA FJALLSARLON, LAGUNA JOKULSARLON Y DIAMOND BEACH
Tercer día de viaje y hoy nos toca un plato fuerte, el Parque nacional de Skaftafell, con sus cataratas y glaciares, y tras ellos las lagunas glaciares de Fjallsarlon y Jokulsarlon. Va a ser una jornada de menos kilómetros en coche, pero de muchas horas andando, aunque sin duda los paisajes que vimos marcieron la pena.
Salimos sobre las 9 de la mañana de nuestro hotel, el Fosshotel Nuppar, y comenzamos a hacer kilómetros, nuestra primera parada fue junto al monte Lómagnúpur.
LÓMAGNÚPUR
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| Lomagnupur |
La montaña Lómagnúpur es una de las más famosas del país, de hecho es uno de los cuatro símbolos protectores de Islandia. Se caracteriza por tener un enorme acantilado en la cara sur de casi 700 metros. Es impresionante su imagen cuando vas por la carretera justo antes de llegar al Parque Nacional. Desde sus faldas se ven ya las lenguas glaciares que salen del glaciar Vatnajokull.
Las historias relacionadas con Lómagnúpur han existido por mucho tiempo, y está contenida en alguna de las sagas islandesas.
Lómagnúpur es una de las pocas montañas en Islandia que tiene deslizamientos de tierra inesperados, incluso cargados con grandes rocas y icebergs. Uno bastante significativo fue documentado a mediados del siglo XVII en el lado oeste. El último deslizamiento ocurrió en 1988 y se puede ver como si fuese una cicatriz en la montaña.
Justo antes de alcanzar el parque nacional hay una gran llanura, donde el viento sopla muy fuerte, pero donde paramos por su espectacular belleza. A tu izquierda encuentras la montaña Lomagnupur, de frente las lenguas glaciares del Vatnajokull y a la derecha el Parque Nacional.
Desde Lomagnupur hasta el P.N.Skaftafell hay al menos 35 kms, una media hora de camino. Nosotros paramos un par de veces. Hay que tener mucho cuidado al estacionar el coche, aparcarlo siempre en la orientación contraria al viento, ya que de lo contrario puede arrancarte la puerta al abrirla. Puede resultar exagerado lo que indico, y así lo pensé yo cuando nos advirtieron en la compañía de alquiler de coches, hasta que lo comprobé por mi mismo.
Pero los paisajes son simplemente espectaculares, y la sensación de soledad apasionante. De hecho, podías llevarte muchos minutos sin que pasara vehículo alguno, siendo el único sonido el del viento a tu alrededor.
Esta zona es también de fuertes aluviones cuando existe alguna erupción volcánica, esto es porque la misma hace derretirse parcialmente a los glaciares, originando una torrentía de agua y hielo que desemboca por esta zona plana en el mar. Justo a medio camino se encuentran los restos retorcidos de la base de un puente que se lo llevó una de estas inundaciones.
PARQUE NACIONAL SKAFTAFELL (VATNAJÖKULL)
Por fin llegamos al Parque Nacional, para ello giramos a la izquierda desde la Ring Road (N1). A unos cinco minutos encontramos el centro de visitantes, con un parking donde dejar el vehículo. El parking es de pago y debes sacar el ticket dentro del centro de visitantes. Una vez en el centro de visitantes, puedes ver las distintas rutas que hay, y dependiendo de la época del año puedes elegir la que mejor se adapte a tus posibilidades.
Skaftafell era una granja señorial y un lugar de reunión local durante la Edad Media hasta que fue adquirida por la Iglesia y con posterioridad a la corona danesa. El el parque existieron hasta tres granjas, y de hecho hasta el año 1960 pertenecía a tres familias. Fue a partir del año 1968 cuando se declaró finalmente como Parque Nacional. En el 2008 se amplió denominándose Parque nacional Vatnajökull.
Nosotros queríamos hacer la ruta que conduce a Svartifoss, para después girara a la derecha al mirador Sjonarnirpa, pero aunque pudimos alcanzar Svartifoss con cierta comodidad, los accesos a Sjonarnirpa estaban cerrados, y es que el deshielo provocaba que hubiese gran cantidad de barro y placas de hielo, siendo peligrosos los senderos.
La primera de las rutas que finalmente hicimos nos llevó por las cataratas de Hundafoss, Magnusarfoss y Svartifoss, la famosa catarata de basalto y es un fácil trekking de aproximadamente dos horas entre ida y vuelta. El trekking se inicia a la izquierda del centro del visitantes, y comienza con unas escaleras que ya te dejan un poco tocado y a continuación rampas de mas o menos pendiente durante al menos media hora.
Durante el camino nos encontramos con bastantes arroyos helados que provienen del deshielo del glaciar.
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| Hundafoss |
Conforme vas subiendo vas oyendo el sonido del agua y aunque en un principio no consigues adivinar donde se encuentra la catarata, si te agachas y miras entre las ramas puedes verla claramente.
Después vemos un mirador, aunque no tiene unas vistas tan espectaculares como vimos unos metros antes.
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| Magnusarfoss |
Seguimos caminando un buen rato y nos encontramos con la siguiente casada, Magnusarfoss. Esta es la más pequeñas de las tres que vimos en la ruta. Las cataratas bajan unos 9 metros por un tobogán inclinado, y luego cae a lo largo de un borde saliente en la pequeña pared del acantilado. Al igual que Hundafoss que habíamos visto antes, Magnúsarfoss está algo obstruido por el follaje por lo que si no vas atento al ruido del agua puedes pasártela por alto.
Seguimos caminando durante un buen rato, ahora el camino se hace más empinado, o también puede ser que fuésemos más cansados, pero parece que no íbamos a llegar nunca. La parte positiva es que había salido el Sol, y la intensidad del frío se redujo.
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| Svartifoss |
Antes de llegar al Svartifoss, vimos a la derecha el sendero que conduce al mirador de Sjonarnirpa, pero como dije antes estaba cortado por precaución, me acerqué a la entrada pero era imposible andar mas por el barro.
Ya veíamos a lo lejos Svartifoss, también la llaman la catarata de basalto y es sin lugar a dudas, una de las más famosas de Islandia. La caída no es espectacular, pero si el contorno, repleto de columnas basálticas hexagonales.
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| Svartifoss |
Tras dejar el sendero principal, se llega al pie de la catarata a través de otro sendero mucho más estrecho. Al final del mismo hay un puente desde donde apreciar frente a frente la catarata, y un poco más arriba un mirador justo al pie de la misma, prácticamente junto a la caída del agua. Cuando estuvimos, era pleno mes de Abril y el deshielo hacía que un gran caudal de agua cayese sobre la nieve del fondo, resaltando aún más si cabe el color negro del basalto.
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| Svartifoss |
Después de un buen rato contemplando el paisaje, volvemos por el mismo camino, y tras otra hora volvemos al centro de visitantes. Habíamos tardado menos tiempo del que habíamos previsto al no visitar Sjonarnirpa, así que miramos alguna ruta alternativa a realizar en el parque. Vimos una ruta cercana ( la número 1) que nos llevaba a las faldas del mismísimo glaciar Skatefellsjökull.
SKAFTAFELLSJÖKULL
A la derecha del centro de visitantes parte la ruta hacia la lengua del glaciar Skaftafellsjökull. Es una ruta de unos 2 kilómetros de ida, que recorrerás en algo mas de media hora y con una leve subida. El trayecto es bastante inhóspito, de matorral bajo y con alguna que otra pequeña caída de agua.
El paisaje cambia conforme nos acercamos al glaciar, pues lo primero que vemos es una gran planicie desértica, es el terreno que ha ido dejando el glaciar durante si retroceso en estos años. Skaftafellsjökull es un excelente pero preocupante ejemplo de cómo el cambio climático está afectando constantemente a los glaciares a lo largo de los años, pues durante la última década, Skaftafellsjökull ha estado retrocediendo dramáticamente
El terreno esta formado por una piedra fina, casi triturada por el peso del hielo a lo largo de los milenios, que se encuentra conforme más te acercas al glaciar mas y más humeda.
La primera visión de la lengua del glaciar es asombrosa, rodeadas de unas altas montañas cubiertas de nieve y con el gran glaciar Skaftafell colmando el valle.
Conforme te acercas a la pared del hielo, es aun son mas impresionantes las vistas, pues te das cuenta del tamaño real de la pared de hielo. Su color es blanco y negro y es que arrastra la ceniza provocada por las erupciones volcánicas.
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| Skaftafellsjökull |
No puedes acercarte hasta tocar la pared del glaciar, pues se ha formado un lago glaciar por el deshielo. Lo que si pudimos hacer es rodear el lago y subir por alguna de las zonas laterales de la lengua del glaciar y caminar un rato sobre el mismo. No es seguramente lo mismo que caminar en el interior del glaciar como hacen las excursiones (a 150 euros por persona), pero es desde luego una experiencia indescriptible.
El terreno se encuentra helado y eso que es la zona más próxima al deshielo del glaciar, así que lo ideal es ir con crampones, pero si vas con cuidado puedes subir y contemplar las inolvidables vistas, descubrir las cuevas de hielo que se han formado y disfrutar del viento helado sobre la cara.
Pasamos mucho tiempo en la lengua del glaciar, haciendo fotos y contemplando una y otra vez este paisaje que hipnotiza. Dejamos la lengua glaciar y volvemos sobre nuestros pasos, hay una ruta de retorno alternativa pero es un poco mas larga y tampoco tiene mucho atractivo.
Al volver al centro de visitantes aprovechamos para comer en unos merenderos que hay junto a la entrada principal. Tras reponer fuerzas, volvemos al coche y continuamos nuestro viaje.
En un principio no teníamos previsto ver esta lengua glaciar, realmente no sabíamos ni siquiera que se pudiera acceder hasta la misma, y solo fue la simple casualidad, la razón por la que la descubrimos.
Justo al salir del centro de visitantes y salir a la Ring Road (N1), vimos como un autobus 4x4 se adentraba por una carretera de grava que parecía dirigirse hacia la otra lengua glaciar que se veia desde el centro de visitantes, Svinafelsjökull.
Como íbamos bien de tiempo, nos decidimos a seguirlo, pues teníamos la certeza de que algo bueno había detrás de la montaña que rodeaba la carretera. Después de unos 15 minutos por una carretera de grava, en bastante mal estado, descubrimos una de las sorpresas inesperadas del viaje, una lengua glaciar a la que podíamos llegar hasta el propio hielo, y donde no había turistas, estaba solo para nosotros.
A lo lejos pudimos ver un grupo de unas quince personas que comenzaban a subir por el glaciar en una de las excursiones. Nosotros dejamos el coche y comenzamos a andar hacia la lengua glaciar.
El terreno, al igual del Skaftefellsjökull, es de piedra completamente pulida por el peso del hielo, aquí la lengua se aprecia que se ha retirado unos cientos de metros. Conforme andas notas que te hundes en el terreno un poco, esto es debido a que la tierra aun contiene agua glaciar.
Llegamos a la orilla, se ha formado un pequeño lago glaciar sobre el que flotan los glaciares, aunque gran parte de la lengua glaciar se encuentra completamente helada en la orilla.
La espectacularidad del lugar, y la posibilidad de disfrutar de un sitio como este para nosotros solos, es algo que conservaremos siempre en la memoria como uno de los lugares top del viaje a Islandia.
Svinafellsjokull, debido a sus crestas , grietas profundas, vistas espectaculares y una viva coloración azul y blanca, se utilizó en la Temporada 7 de Juego de Tronos para representar las duras tierras al norte del Muro.
LAGUNA FJALLSARLON
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| Laguna Fjallsarlon |
A unos 50 kilómetros de Svinafellsjokull se encuentra el lago glaciar llamado Fjallsarlon. Al lago glaciar desemboca la lengua glaciar Fjallsjökull, que se origina en el gran glaciar Vatnajokull. En el lago se pueden ver claramente grandes icebergs que se han desprendido de la capa de hielo y flotan por la laguna hasta quedarse varados en la orilla. Fjallsárlón es menos conocida y menos impresionante que su vecina Jökulsárlón, pero merece la pena, por haber una menor afluencia de visitantes y ser una visita más relajada. |
| Fjallsarlon |
Al igual que Jökulsarlon, Fjallsarlon se caracteriza por sus icebergs únicos y relucientes. Ningún iceberg es similar, con cientos de formas y tamaños diferentes flotando lentamente sobre el agua.
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| Fjallsarlon |
Puedes realizar recorridos en zodiac por Fjallsarlon, y ver los icebergs de cerca. Esta práctica que se originó en la vecina Jökursarlon, esta tomando auge en Fjallsarlon, de hecho cuando nosotros estuvimos estaban construyendo una ampliación del restaurante para alojar lo que supusimos eran casetas para la venta de excursiones turísticas, así que puede ser que en los próximos años la tranquilidad y soledad del lugar desaparezca por completo.
Aprovechamos para acercarnos a la orilla del lago glaciar y hacernos algunas fotos sobre los icebergs varados en la orilla... Nuestra siguiente parada...Jökullsarlon.
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| Fjallsarlon |
LAGUNA JÖKULSARLON
La laguna se forma de forma natural, a partir del agua glacial derretida que proviene del glaciar y cada año se agranda, ya que grandes bloques de hielo se desmoronan desde el glaciar cada vez más decreciente hacia la laguna, de hecho el lago apareció en 1934, antes no existía.
A solo unos minutos de la laguna de Fjallsarlon se encuentra otra laguna glaciar, aun mas impresionante y que es uno de los lugares imprescindibles en Islandia. Supongo que la visita es diferente si la haces en Invierno o en Verano, y todo tienes pros y contras. En Verano entre los pros hay que contar con la posibilidad de realizar actividades que puedes hacer en la laguna, como ir en una lancha entre icebergs o coger un camión acuático para navegar entre ellos, entre las contras el elevado coste de estas excursiones y la elevadísima cantidad de turistas que encontraras y que rompen la magia del lugar.
En invierno no podrás realizar las actividades, el lago se encuentra repleto de icebergs y la navegación es muy complicada, sin embargo podrás disfrutar del lugar en ocasiones para ti solo, ver focas nadando entre los glaciares y disfrutar a tope de la magia del lugar.
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| Vista panorámica de Jokulsarlon |
Hay dos opciones para ver la laguna de Jokursarlon, una salida desde la carretera N1 antes de un puente y la salida que hay tras el mismo. La primera de ellas es sin duda la mejor y desde donde tendrás las mejores vistas. La segunda salida es la orilla desde donde salen en verano los camiones anfibios, y es donde se paran todos los camiones de turistas.
Afortunadamente y casi de casualidad paramos en la primera salida, y disfrutamos del lugar como niños, pues en Abril hay poco turismo por estas latitudes y los que hay nos vamos encontrando por todos los sitios.
Nada mas llegar recibimos una enorme sorpresa, una foca, nadaba y jugaba plácidamente a pocos metros de nosotros. Estuvimos mas de media hora viendo como la foca nadaba entre los icebergs y observaba fijamente nuestras reacciones.
Lo más recomendable es hacer un paseo por la orilla, así se puede ver con total amplitud el lago glaciar, se oye el hielo crujir y te quedas ensimismado con el suave movimiento de los icebergs por el agua.
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| Jokulsarlon |
El color de los icebergs suele ser blanco con algunos tintes grises por la ceniza volcánica, aunque también se encuentran icebergs de un azul intenso. Los iceberg tiene dentro del agua nueve décimas partes, al agua poco a poco va fundiendo el hielo y limpiándolo de ceniza, por lo que una vez lo ha fundido bastante el fondo, el iceberg se da la vuelta y es entonces cuando se puede ver con ese azul intenso.
Recorriendo la orilla puedes contemplar trozos de hielo enormes, desprendido de glaciares sobre la orilla.
Poco a poco va cayendo la tarde y cada vez hay menos turistas como nosotros en el lugar, es el momento de la tranquilidad, de disfrutar del paisaje. La singularidad del lugar es impresionante, no es de extrañar que aquí se hayan hecho exteriores de varias películas, como "Interesterlar", "James Bond" o "Batman Begins"
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| Jokulsarlon |
DIAMOND BEACH
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| Diamond Beach |
Nada mas salir de Jokulsarlon, encontrareis otro de los lugares inigualables de Islandia, la llamada Diamond Beach. Para llegar solo tienes que tomar el camino que sale a la derecha antes de cruzar el puente. Encontrarás un aparcamiento donde dejar el coche.
El lago glaciar Jokulsarlon esta conectado con el mar a través de un pequeño canal por donde desagua una gran cantidad de restos de icebergs. Estos trozos de hielo de variado tamaño, llegan al mar y son devueltos a la orilla de la playa por la marea.
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| Diamond Beach |
El resultado es una playa de arena negra cubiertas de grandes trozos de hielo, que parecen trozos de diamante sobre un tapete negro.
El sitio es inolvidable e irrepetible.
Dejamos Diamond Beach cuando ya cae la tarde, y nos dirigimos hacia la Lilja Guesthouse, muy recomendable por su relación calidad precio, con gente muy amable, y con una nueva zona de habitaciones de diseño ecológico muy confortable.
De camino pasamos por el Mirador de Eskey, un lugar desde se puede ver varias lenguas de glaciar desde lo alto de un pequeño cerro.
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