CINQUE TERRE

CINQUE TERRE

El Parque Nacional de Cinque Terre está situado en el norte de Italia, muy cerca de La Spezia, siendo este un sitio ideal para planificar tu visita, aunque está muy cera de otras localidades como Génova, Pisa o Florencia. El Parque Nacional está formado por cinco pequeños pueblos que parecen enclavados en sitios imposibles, rodeados de montañas y mar.

 

La mejor forma de ver estos cinc pueblos, Riomaggiore, Manarola, Corniglia, Vernazza y Monteroso al Mare, es sin duda el tren, ya que por carretera son de dificil acceso y además de mareantes duplican el tiempo de la visita. Si optas por esta opcion lo mejor es sacar la tarjeta "Cinque Terre Card", que te permitirá subir y bajar al tren en estos pueblos cuantas veces quieras. (La tarjeta puedes sacarla en esta pagina "www.cinqueterre.eu.com/es/cinque-terre-card"). En relación a la opcion del tren hay que advertir de dos cosas, la primera que no te tiente viajar sin billete, a pesar de las cortas distancias entre los trayectos, ya que hay inspectores y las multas son cuantiosas, y segundo, la calidad de los trenes deja mucho que desear, además de la masificación existente que llega a ser indecente en algunas ocasiones. Si a esta masificación le unes el intenso calor que existe en Verano, la situación puede llegar  a ser insostenble si vas con personas mayores o niños.

Nosotros salimos de la estación de tren de La Spezia, con la tarjeta comprada en el Puerto Marítimo, aunque la puedes comprar también en la estación de trenes. Hay trenes cada treinta minutos, pero siempre llegan tarde, así que armate de paciencia y busca la forma de situarte en primera linea si quieres ir sentado.

Como llevabamos tiempo limitado, optamos por ir hasta el ultimo pueblo para ir haciendo el camino de vuelta, asi que nuestro itinerario fue, Monterroso al mare, Venazza, Manarola y Riomaggiore, pues la parada en Corniglia la saltamos, ya que la estación queda lejos del pueblo y hay que subir grandes cuestas, cosa que con niños e insisto, el agobiante calor, se hace misió imposible.

MONTEROSSO AL MARE

 Nuestra primera parada es en Monterosso, desppués de casi 50 minutos en tren. Se trata del pueblo más grande y turístico de los cinco, con playa publica y privada, y con gran cantidad de comercios.

Nada más salir de la estación de tren encuentras la playa, en la foto se puede ver claramente cual es la parte privada (con sombrillas azules) y la pública (sin ellas). La aglomeración es total, pues son playas con muy poca zona de arena.  

No obstante a pesar de todo, si puedes pégate un chapuzón, te ayudará con el sofocante calor.

Torre de la Aurora

Torcemos a la izquierda y nos dirigimos hacia la parte antigua del pueblo, separada de la zona de la playa por un peñasco sobre el que se alza un torreón, llamado la Torre de la Aurora, construida en el siglo XVI para prevenir el ataque de piratas. 

Las vistas desde este peñasco merecen la pena porque tienes una visión de 180 grados, con el pueblo a un lado y las playas al otro. Para acceder al pueblo puedes optar por rodear el torreon a través de un camino estrecho y que serpetea al peñasco, o usar el nuevo tunel que lo atraviesa.

Alcanzamos el pueblo, como siempre por el sitio más dificil con tal de sacar buenas fotos... el pueblo es muy pequeño, con una playa jutno al puerto, y frente al Ayuntamiento. Esta zona es peatonal por lo que se puede pasear tranquilamente, y está llena de callejuelas estrechas y empedradas, porticos de piedra y cantidad de tiendas y restaurantes. Es un sitio agradable para pasear, mirar tiendas y tomarte una cerveza tranquilamente.

Iglesia de San Juan Bautista

Tomamos la Via Roma, que es la calle principal, y alcanzamos la Iglesia de San Juan Bautista , del siglo XIV, que me recuerdan mucho a las iglesias florentinas, con la piedra blanca y negra. 

Junto a esta el Oratorio dei Neri, perteneciente a la Hermandad de la Oración y Muerte y su historia es curiosas, pues proviene de la época de la peste, donde tal era el número de fallecidos que se creo una hermandad para aquellas familias que no podían costear el entierro de sus miembros. Posteriormente la hermandad, denominada ya entonces como la Compañía de la Muerte" tomó la costumbre de orar unos 40 días por el difunto por lo que el Papa Julio III, le impuso el término "Oración", siendo desde entonces la Hermandad de la Oración y Muerte. El hecho de que los miembros de la Hermandad, durante la oración llevasen capuchas negras, es por lo que se le llama, Oratorio dei Neri u Oratorio de los Negros.

Oratorio dei Neri

VERNAZZA

Vernazza

Volvemos a coger el tren y despúes de unos diez minutos llegamos a Vernazza, para mi uno de los pueblos más bonitos y con más encanto. La estación de tren queda en la parte alta del pueblo por lo que tendrás que vabar por la Via Roma (aquí no hay puebl que se precie si no hay una Via Roma), que baja hasta el puerto. La Via Roma es la calle principal, con casas coloreadas y con grandes ventanas con palilleria, como es normal en las casas genovesas.

Al final de la Via Roma encontramos la zona más bonita del pueblo, una pequeña playa rodeada de acantilados, con su iglesia de Santa Mararita de Antioquia a uno de los lados. El contraste del verde de las montañas  repletas de viñedos, el azul del mar y la mezcla de colores en las fachadas de las casas convierten a Vernazza a uno de los pueblos más bonitos de la Liguria italiana.

La Iglesia de Santa Margarita de Antioquia fue construida en el 1318 en  estilo gótico-ligure. Se dice que fue construida allí porque antiguamente se encontró en ese lugar una cajita de madera que contenía en su interior los huesos de un dedo de la mano de Santa Margarita. La originalidad de esta iglesia estriba en su campanario octagonal y su curiosa distribución interna: la puerta se encuentra al lado del altar, separada por una escalinata por una barandilla.

MANAROLA

Vuelta al tren, esta vez con mas suerte, uno con aire acondicionado, se nota que estamos a mediodía porque baja la cantidad de gente en el tren. Aprovechamos al llegar para buscar un sitio donde comer, y es que no terminamos de acostumbrarnos al horario europeo, simplemente no tenemos hambre a estas horas.

Manarola s para mi gusto el tipo de pueblo que es más bonito verlo desde lejos que desde cerca, pues la estampa de manarola desde los miradores del sendero litoral son simplemente impresionantes.

Via Antonio Discovolo

La estación no está en el pueblo pero tampoco muy lejos, a unos cinco minutos andando. Se alcanza la calle principal, llamada Via Antonio Discovolo, y como decía antes, aprovechamos para almorzar en el restaurente "Il Porticciolo", comida de la región exquisita, a un precio asequible dada la temporada alta del año, y es que en Italia, al contrario que en España, la bebida es comparativamente mas cara que la comida.

En la Via Antonio Discovolo, hay que destacar la cantidad de tiendas, restaurantes y puestos que encontramos, lo que da una vida y un ajetreo tremendo a este pequeño pueblo.

 

 

Cuando alcanzamos el puerto nos llama la atención que no hay playa, sino unos riscos enormes desde donde los paisanos y turistas aprovechan para saltar, en algunos casos desde una altura respetable.

Despues de ver durante un rato como se tiraban una y otra vez desde los riscos, tomamos la senda litoral para ver desde lejos el puerto, y es desde aqui donde vemos unas de las imagenes más bonitas de nuestro paseo por Cinque Terre, y creo que una imagen vale más que mil palabras.

Manarola

RIOMAGGIORE

Malecón

Última parada por los pueblos de Cinque Terre, el bonito pueblo de Riomagiore. Al salir d ela estación nos dirigimos directamente hacia el Puerto, denominado malecón de las piedras. 

Riomaggiore es una población sumamente empinada, totalmente peatonal, llena de casas de colores y calles empedradas. en las calles en vez de encontrar coches encontramos barcas y es que en estos pueblos necsitas moverte por el mar. 

En el malecón hay una pequeña playa donde puedes refrescarte, y tras esto, coge un pequeño sendero que queda en el lateral izquierdo, sube hasta un restaurante desde donde puedes sacar unas fotos estupendas de este pintoresco pueblo

Riomaggiore

CANNES

CANNES

Cannes es una de las ciudades más importantes de la elegante y afamada Costa Azul francesa. Probablemente a todos nos suena Cannes, por su famoso festival de cine, y todo el glamour que rodea la alfombra roja. Aunque es cierto que encontraremos muchas referencias al cine, no todo es cine en la vida de Cannes, sino que podrás encontrar su barrio antiguo, iglesias, y callejuelas.

Para situarte y organizar una visita lo mejor sería que te dirigieses al Viejo Puerto, desde allí puedes partir para visitar andando el barrio de Le Suquet, el Palacio donde se celebra el Festival de Cine, el Ayuntamiento y las callejuelas aledañas y por su puesto la Croissette.

Desde el puerto podemos ver una vista del Barrio de la Suquet, sobre la que destaca la torre de la Iglesia de Nuestra Señora de la Esperanza. También desde aquí vemos murales con motivos cinéfilos en los edificios que dan colorido al centro de la ciudad y muy cerca de allí el Ayuntamiento.

Justo a la izquierda del Viejo Puerto, donde amarran cientos de embarcaciones, encontraremos la subida hacia el Barrio de la Suquet. Este barrio, uno de los más populares de Cannes, es un conjunto de calles estrechas con multitud de tiendas de artesanía, souvenirs y muchos restaurantes. 

Entramos en el barrio de la Suquet, por la Rue Saint Antoine, una calle en cuesta, y como decía antes repletas de tiendas de artesanía y souvenirs, además de muchos restaurantes. Como afluentes de un río, en la Rue Saint Antoine desembocan numerosas callejuelas empinadas y estrechas que le confieren encanto al lugar.

En la cima del Barrio de la Suquet encontramos la Iglesia de Nuestra Señora de la Esperanza, donde podemos disfrutar de unas hermosas vistas del Viejo Puerto y del mismo Barrio de la Suquet. La iglesia, fue construida entre los siglos XVI y XVII en estilo gótico provenzal. El interior de la iglesia, al contrario de las muchas que encontramos en España, es asutera, con  escasos elementos decorativos.

Lo mejor de subir hasta la Iglesia de La Esperanza son las vistas que puedes disfrutar de Cannes, especialmente del Viejo Puerto, y es que esta zona era la Cannes medieval, más abajo todo es glamour y modernidad.

Junto a la Iglesia de La Esperanza, encontramos una pequeña plaza presidida por  Nuestra Señora de la Esperanza, y justo al lado, otro de los atractivos turísticos de Cannes, El Museo de la Castre, que se asienta sobre un castillo medieval que fue posesión de los abades de Lérins . El castillo domina la Croisette, la bahía y las Islas de Lérins y fue construido a finales del siglo XI para defender la ciudad. Hoy en día el castillo está clasificado monumento histórico y alberga desde 1952 las colecciones de arte de Oceanía, América, el Himalaya, antigüedades mediterráneas, pintura oriental y provenzal, además de un excepcional conjunto de instrumentos de música del mundo entero.

Dejamos la cima de la Suquet y comenzamos a bajar por sus calles serpenteantes que desembocan en el Viejo Puerto. Las casas son todas de dos plantas con balcones y normalmente juegan con los colores de las fachadas para dar la sensación de un sitio pintoresco.

Llegamos nuevamente a la zona del viejo Puerto y el ambiente vuelve a cambiar radicalmente, la paz y el sosiego de las calles de la Suquet, entramos en el lujo y el glamour que rodea Cannes. Y es que realmente no es un tópico, el glamour se respira por las calles, los enormes yates de lujo, y los flamantes deportivos se vuelven habituales en el paisaje.

Antes de dirigirnos al Palacio de Congresos donde se celebra el Festival de Cone nos decidimos a recorrer el paseo marítimo llamado La Croisette, para disfrutar del ambiente y ver las playas de Cannes. 

Lo primero que nos llama la atención es la cantidad de playas privadas que existen, playas a las que solo puedes acceder previo pago, ahora bien dentro encuentras todas las comodidades, hamacas de lujo, restaurantes, bares de copas con personal dispuesto a satisfacer todas tus necesidades... si los comparas con los chiringuitos de Cádiz, algo completamente extravagante.

Recorremos la Croisette, hasta el famoso Hotel Carlton Internacional, que es donde se alojan todas las estrellas durante el festivald e Cine y que es visita obligada para todo turista. El edificio es hermoso, pero tampoco para tirar cohetes, simplemente, el glamour del cine entroniza a lugares por su simbolismo... lo dicho, una parada para la foto y a seguir.

La vuelta desde el Hotel Carlton Internacional la hacemos por el boulevard de la Croisette, por los jardines, que para nuestra sorpresa están adornados con motivos de las películas más famosas del cine, una oportunidad para hacernos una foto con Leonardo di Caprio en mismo Titanic o pasear por la alfombra roja como un artista famoso.